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martes, febrero 21, 2012

El cuento de los seis enanitos, no siete Segur Ibérica

El cuento de los seis enanitos, no siete Segur Ibérica
Hoy como cada día comienzas con un nuevo reto, es decir, te decides a salir de casa porque tienes la obligación de trabajar, el que tenga esa suerte claro está, pues como están las cosas, el trabajar por un salario digno va a ser un lujo, un capricho del destino, si no, mírate la nómina después de los recortes. Pero bueno sigamos con lo nuestro. ¿Por dónde íbamos? ¡Ah! Sí. Queríamos contar, no más bien relatar un cuento que en ciertos aspectos tiene similitud con la realidad. Empecemos pues.

Erase que se era en un lugar llamado España, para más inri Madrid, en un sitio con denominación de origen “Segur Ibérica”, en el citado, se encontraban unos logos que por su singularidad los citaremos como los SEIS ENANITOS. Veamos pues los que son: CCOO, UGT, USO, ATES, Alternativasindical y SIV-M. Éstos, a su vez, estaban compuestos por unos seres diminutos, que según parecen o así decían, representaban a otros a los que llamaremos TRABAJADORES, pero con el tiempo se ha visto que sólo se representaban ellos mismos.

Volvemos a usar la misma frase. Veamos pues. En ese estado febril de representar, se reúnen con otros a los que citaremos como DIRECCIÓN. Unos más que otros, hacen alarde de su oratoria e intentan convencer a los de la otra parte que la razón está de parte de ellos, vamos que es su estandarte. En estos dimes y diretes, unos, más escuchan que hablan y razonan, y otros, más hablan que escuchan. Todos quieren llevar la razón ante las explicaciones expuestas, pero, ninguno piensa que esos “dimes y diretes” son recortes y que éstos en definitiva afectarán y joderán a la plantilla.

Como era de esperar, en este cuento de verdad, al no ponerse de acuerdo, los supuestos cuerdos, tiran por la calle de atrás y con esta singularidad al pueblo joden ya.

No pensaron los enanitos, en informar a los más bajitos, que eso de callarse y no consultar a las bases, esto, no iba a gustar, pero como los seis enanitos no discurren al pensar, sólo se limitaron a CALLAR, CALLAR Y CALLAR. Con este silencio oculto sólo benefician al patrón en el tumulto y la plebe jodida está, sin saber que va a pasar.

Amén, Señor, por no decir amo o patrón como dicen los sinrazón que negocian o hablan con la dirección.


Por favor, pásalo. Se valiente

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