Convenio
de Seguridad Privada 2013: Las mierdas no se firman
Hoy es un buen día para comentar los tres últimos
milagros de los grandes sindicatos o mejor dicho, de sus sindicalistas santones
o milagreros.
No podemos salir de nuestro asombro al comprobar
tales proezas en el sindicalismos radical al que nos tienen acostumbrados (AADD
CCOO – FES UGT – FTPS USO), desde luego, si lo comentas por cualquier sitio, ya
no sin un intelecto superior, que va, en cualquier sitio que se precie de
comprender las cosas de estar por casa, nos dirán que esto es cosa de brujería,
de santones o milagreros; pero claro está, cuando les dices, les comentas, que
todo esto es sindicalismo puro y duro, no salen de su asombro diciendo: “No me
lo puedo creer, no me lo puedo creer”. En fin, esto es lo que nos depara la
vida.
Comencemos pues, en su día estos milagreros o
santones negociaron un convenio que abarcaría los años 2009 al 2012, ambos
inclusive; tardaron en negociarlo dos años, vamos que les llevó el 2009 y 2010,
al final sin inmutarse lo firmaron. Como era de esperar, se perdió estos
primeros años en los que estuvieron enfrascados en la negociación, por decir
algo. Para el 2011 su logro fue un 1% de subida, que barbaridad; el resto lo
dejaron para el 2012, donde se supone que recuperaríamos lo dejado de percibir
en los años 2009-2010. No fue así, cuando llegó el momento de la gran subida, la
patronal se saco perdidas por doquier llegando amedrentar a los componentes
sindicales, que no les hacía falta para nada, que en menos que canta un gallo
firmaron un nuevo convenio, esta vez con una vigencia 2012-2013-2014
Pasando el tiempo,
no menos de nueve meses esperando su publicación en el BOE; la patronal con sus
pérdidas empezó una política para desgaste –si algún momento la tuvieron- los
sindicalistas firmadores de lo que sea. Empezaron, que si sí, que si no, que si
mírame estas pajas, que no podemos pagar esa subida pactada, acordad y firmada,
por lo que empezaron un nuevo juego, que como siempre perjudicara a los
trabajadores del sector de seguridad privada. Y hete aquí, que se obró el
milagro de los panes, más que panes, panecillos y pececillos, firmando un nuevo
y prodigiosos convenio que nos jodía todavía más llegando a rebajarnos el salario
y flexibilizando la jornada mensual, lo gracioso de esto, es que el anterior no
se llegó a publicar. De momento aquí termina la historia interminable de
convenio miserable.
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