El vigilante es el primer escollo
NOTA AJENA A LA CARTA.- Desde aquí invito a todos los
vigilantes (ya sean, “Las” o “Los”), a que denuncien las agresiones que venimos
sufriendo diariamente, pero de las que los medios de comunicación no se hacen
eco, ahora eso
sí, que un vigilante agreda a una persona, no dudaran en publicar esa agresión –supuesta, claro está- en sus medios desacreditando al infortunado vigilante o al sector, en muchos casos no miran los motivos que produjeron el altercado, simplemente el chulo del vigilante arde a……, o el macarra de turno hace uso indebido de……. Esto es lo triste de la historia que nos envuelve. Una etiqueta mal colgada pero que siempre nos acompaña.
sí, que un vigilante agreda a una persona, no dudaran en publicar esa agresión –supuesta, claro está- en sus medios desacreditando al infortunado vigilante o al sector, en muchos casos no miran los motivos que produjeron el altercado, simplemente el chulo del vigilante arde a……, o el macarra de turno hace uso indebido de……. Esto es lo triste de la historia que nos envuelve. Una etiqueta mal colgada pero que siempre nos acompaña.
Contenido de la carta publicada:
Sábado, 4 de agosto del 2012 Antonio Mengual López - (Riells i Viabrea
(La Selva))
Como Carmen Carrera, cuya carta se publicó el 30 de
julio, yo también soy vigilante de seguridad y he estado en multitud de
servicios. Quiero aclarar a la lectora que escribió sobre la agresión de los
vigilantes, que estos fueron solicitados por un interventor, y en cuanto a la
persona que decía que pedía auxilio, me extraña que pudiera hacerlo mientras le
mordía la mano al vigilante que intentaba sacarlo de la estación. Durante el
forcejeo para intentar reducirlo, le dio una patada a otro vigilante y se
encaró a los Mossos, que se vieron obligados a llevárselo. Ojalá, al ver a un
vigilante, la gente pensara que muchas veces somos el primer escollo de los
delincuentes y debemos enfrentarnos a personas violentas y con problemas
mentales. A nosotros nos pagan por velar por su seguridad, no por pegarnos;
cobraríamos lo mismo quedándonos de brazos cruzados. Les invito a ir algún
sábado en un tren de Sabadell Sud para que vean lo complicado que es nuestro
trabajo.
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