En Memoria del Personal de Seguridad Privada que nos ha dejado.
A veces no hay más bellas palabras ni mejores que las imágenes. Esperemos que estéis
donde estéis compañeros, en algunos casos amigos, familiares, como Rafael García Jiménez, José Antonio Jiménez Ceferino y tanto y tantos vigilantes que han caído dando su vida por un mísero sueldo que llevar a su casa para poder mantener a la familia.
donde estéis compañeros, en algunos casos amigos, familiares, como Rafael García Jiménez, José Antonio Jiménez Ceferino y tanto y tantos vigilantes que han caído dando su vida por un mísero sueldo que llevar a su casa para poder mantener a la familia.
Hoy en día éstas son olvidados por empresas, sindicatos y me duele ponerlo, incluso por compañeros. Ayer, hoy y mañana sólo les lloraran y recordaran sus familiares, sus seres queridos.
Es doloroso mirar atrás y ver los vigilantes que se han quedado por el camino victimas de la violencia gratuita, en algunos casos. Es muy doloroso ver como después de dar su vida, sus familiares, sus seres queridos, no pueden subsistir con la miseria de pensión que perciben y todo gracias a los lastimosos salarios que tenemos.
Tenemos que ser capaces de una vez por todas, de reivindicar dignidad, defendernos nosotros mismo de tanta explotación por parte de ésta patronal usurera, de éstos clientes exprimidores que se creen que una vida vale tan poco, de éstos sindicatos, juntos con los creemos que nos defienden –los sindicalistas- que lo único que hacen es defender sus intereses, en algunos casos personales.
Si compañero y compañera, de una vez por todas nos sirva de ejemplo que la vida de éstos compañeros, el sufrimiento de sus familiares, el futuro que les queda a estas familias después de óbito de aquel o aquellos que sustentaba con lo que llevaban a final de mes, nos deben de servir para continuar y luchar, defender nuestros derechos, dignificar nuestra profesión y que se reconozca tanto socialmente como laboralmente con un salario que nos valga para poder vivir tanto nosotros o nosotras como nuestras familias y más en caso de que nos pase algo, que no y tengamos que mendigar lo que es nuestro, lo que nos pertenece.
Hay que luchar por un Convenio digno, por un salario que podamos vivir sin estar interminables horas de servicio, el día de mañana nadie está libre de que nos pase algo, en ese caso pregúntate hoy como vivirás.
Como dicen mucha gente. Levántate y anda, no estés más tiempo de rodillas.
bayekas
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