José Blanco se autodefine como «un bólido» o «un cohete»para la economía de Galicia
Acto en Santiago
Contrapuso en Santiago su gestión en Fomento con la de Rajoy cuando fue «ministro de casi todo».
EFE 3/10/2010 
El Ministro de Fomento, José Blanco, se ha definido como «el cohete, el bólido» para la economía gallega, y ha contrapuesto su gestión con la de Mariano Rajoy durante sus ocho años como «ministro de casi todo», que «sólo será recordara por los hilillos de plastilina» del Prestige.
Blanco recalcó en un acto del PSOE en Santiago de Compostela que «habrá un antes y un después» tras su paso por el Ministerio de Fomento por el nivel de licitación de obra pública en Galicia, y frente la postura de «resignación» del PP y de la Xunta destacó su «empuje, ambición y mentalidad ganadora» para la comunidad autónoma
Dijo que no permitirá «una sola lección de falsos galleguistas que se acordan de Galicia cuando llueve pero nada hacen por ella cuando escampa», y recalcó que la Xunta «invierte la octava parte» que su departamento en materia de infraestructuras.
Recordó que en 2003, último año del Gobierno de José María Aznar, en Galicia se invirtieron 413 millones de euros en infraestructuras frente a los 1.500 consignados para 2009, 2010 y 2011.
«Podría, ante la crisis, quedarme de brazos cruzados, pero no me resigno», dijo Blanco, ya que «si no lo hacemos ahora, Galicia perderá el tren del futuro» en infraestructuras de comunicación. «Por muchas piedras que me encuentre en el camino, no lo permitiré», aseveró.
Blanco le recordó a Alberto Núñez Feijoo, quien «todos los días intenta tapar sus vergüenzas y la ineficacia de su gestión» mirando al Gobierno central, que «fue elegido para gobernar y no para echar las culpas» a los demás.
Dijo sentirse «orgulloso» de pertenecer al «Gobierno que más se ha comprometido con el desarrollo de Galicia», donde más del 40 por ciento de las pensiones aumentarán su cuantía por encima del 25 por ciento; donde «habrá más becas» y donde los dependientes «tendrán garantizada una cobertura que antes no tenían», enumeró.
En lo que a su Ministerio corresponde, avanzó la próxima contratación de «la mayor obra en la historia de España en un solo paquete», que «pondrá las bases para que en 2011 los gallegos circulen por Galicia en el primer tren de alta velocidad», en alusión al tramo entre Ourense y Santiago.
También concretó que de aquí a abril de 2011 estará operativa la nueva terminal del aeropuerto de Santiago y se habrá puesto la primera piedra de las obras de mejora en los de Vigo y A Coruña; comenzarán las obras de la circunvalación de Santiago y la ampliación del puente de Rande.
También en ese plazo estarán disponibles cinco nuevos tramos de la autovía A-8 y saldrán a licitación las alternativas a la A-59 y la A-57.
Blanco ironizó sobre «la rapidez» de la Xunta en «poner piedras» y en «boicotear» los proyectos de Fomento para Galicia, y sugirió al PPdeG que «no se preocupen» por su persona en términos electoralistas sino que lo hagan por el secretario general del PSdeG, Manuel Vázquez, a quien cedió la palabra.
Vázquez se preguntó «¿dónde estará Feijoo?» con tanto anuncio de obras para Galicia como hizo Blanco, cuyas «muchas contrataciones» contrastan con las «muchas anulaciones» por parte del Gobierno autonómico.
Se refirió en concreto a la licitación de la autovía Carballo-Berdoias, donde el PSdeG cogió «con las manos en la masa» a la Xunta, dijo, y advirtió de que al final «no habrá autovía para la Costa da Morte».
El líder de los socialistas gallegos consideró que el Gobierno de Núñez Feijoo «sólo paraliza y recorta», que su «ética es la del transfuguismo y la corrupción» y que su discurso de «hacer más con menos» y de «no gastar lo que no tenemos» se traducirá para Galicia en «una deuda de 12.000 millones si seguimos a este ritmo».
Pidió el esfuerzo de la militancia para hacer buenos los pronósticos que maneja el PSdeG para las municipales del año que viene y para «hacer ver» a la sociedad que «ésta no es la derecha de siempre sino la ultraderecha».
Vázquez advirtió de que el PP se ha instalado en «la derecha más peligrosa», y que «tras la cara amable y el buen rollo» de sus dirigentes, se están «machacando» el gallego y la sanidad pública; «les da igual», indicó, las listas de espera sanitarias y que se estén cerrando comedores escolares.
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